La distribuidora de electricidad Edenor anunció un plan de inversiones por USD 1.275 millones para los próximos cinco años en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA).
La compañía espera que la audiencia pública de este jueves, en la que el Gobierno definirá nuevos aumentos, permita una recomposición tarifaria en el marco del Proceso de Revisión Quinquenal de Tarifas (RQT).
Planes de inversión y mejoras en el servicio
El plan de inversiones de Edenor incluye la construcción de tres nuevas subestaciones eléctricas en Hurlingham, el corredor norte y General Rodríguez, con un costo estimado de entre 60 y 80 millones de dólares cada una.
Además, la empresa prevé desarrollar un sistema de almacenamiento de energía sin precedentes en el país, con el objetivo de instalar baterías que puedan inyectar electricidad al sistema en caso de faltantes. Esto permitiría evitar cortes de suministro en el AMBA, donde se concentra cerca del 40% del consumo eléctrico nacional. La inversión estimada en esta iniciativa asciende a USD 500 millones.
Edenor participará en la licitación convocada recientemente por el Gobierno para este proyecto, en el que espera sumar alrededor de 270 MW de capacidad para 2027.
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Impacto de la recomposición tarifaria
A pesar del congelamiento de tarifas en los últimos años, Edenor aseguró que mantuvo un promedio de USD 200 millones anuales en inversiones, lo que representa aproximadamente el 50% de sus ingresos. No obstante, la compañía advirtió que sin una actualización tarifaria, seguiría acumulando deudas con CAMMESA (la mayorista del mercado eléctrico).
Por su parte, Edesur, controlada por la multinacional italiana Enel, anunció un plan de inversión de USD 875 millones en el mismo período.
Además de las distribuidoras, el proceso de readecuación tarifaria también involucra a las empresas transportistas de energía eléctrica, como Transener, TIBA, Yacylec, LITSA, LIMSA, INTESAR, Interandes, Transportel Minera 2, Enecor, EDERSA y TRANSACUE.
Nuevos aumentos y eliminación de la tasa de alumbrado
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En enero, las tarifas eléctricas en el AMBA aumentaron en promedio un 247%, según datos del Instituto Interdisciplinario de Economía Política (UBA-CONICET). Este incremento respondió a la reducción de subsidios en el costo de la energía y a la actualización de los valores de distribución y transporte, que representan una parte clave de la factura final.
El nuevo cuadro tarifario será publicado el 31 de marzo y entrará en vigencia el 1° de abril. Según trascendió, los aumentos en los costos de distribución y transporte no deberían superar el 10% para los usuarios. Además, se contempla una actualización mensual de tarifas basada en la inflación.
Por otro lado, en los próximos 60 días, Edenor dejará de incluir en sus facturas el cobro de la tasa de alumbrado municipal, luego de un fallo judicial que determinó que se trataba de un cargo ajeno al servicio eléctrico. Los municipios deberán buscar nuevas formas de recaudación para reemplazar este ingreso.
Futuro de los subsidios
El Gobierno busca avanzar hacia un esquema de subsidios más focalizado, aunque su implementación podría demorarse hasta mediados de 2025.
Actualmente, las subvenciones estatales se asignan según el nivel de ingresos de los hogares en relación con la Canasta Básica Total (CBT) del INDEC. Existen tres categorías de usuarios:
- Nivel 1 (ingresos altos): sin subsidios.
- Nivel 2 (ingresos bajos): mantienen descuentos.
- Nivel 3 (ingresos medios): reciben una asistencia parcial.
Mientras tanto, las empresas del sector continúan ajustando sus propuestas tarifarias en función de la actual segmentación de subsidios.
Percepción de la población sobre los aumentos
Una encuesta de Casa Tres realizada en enero reveló que el 44% de los argentinos prefiere mantener congeladas las tarifas a pesar del riesgo de cortes de luz.
En cuanto a la responsabilidad por los problemas en el servicio eléctrico, los encuestados señalaron:
- 38% a las empresas distribuidoras.
- 34% al Gobierno actual.
- 23% al kirchnerismo.